Según reportes de prensa, los jóvenes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos llegaron en varios autobuses y una vez dentro del inmueble prendieron fuego a diversos objetos.
También dejaron en llamas al menos ocho motocicletas y quebraron vidrios de la edificación.
En meses recientes, los estudiantes realizaron acciones similares de protesta para demandar a las autoridades justicia para sus colegas.
Incluso, en marzo pasado llegaron hasta el palacio presidencial de México justo cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador ofrecía su habitual rueda de prensa.
Entre los manifestantes también había activistas de derechos humanos y familiares de algunos de los 43 jóvenes desaparecidos en septiembre de 2014 en la localidad de Iguala, estado de Guerrero.
Este caso desató una ola de indignación mundial y es considerado una de las peores violaciones de derechos humanos cometidas en México.
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