El sondeo preguntó si los consultados creen que la gobernante colabora con la indagación de la Fiscalía de la Nación o busca entorpecerla y 85 por ciento por ciento respondieron que pretende obstaculizarla y solo 15 por ciento que coopera con las pesquisas.

La encuesta constató también que 75 por ciento aprueban y solo 20 por ciento desaprueban el allanamiento de la casa de la mandataria, que incluyó forzar la puerta, lo que el gobierno consideró atentatorio contra la institucionalidad democrática.

Además, 77 por ciento opinaron que el Congreso, de mayoría conservadora y que rechazó dos mociones de vacancia (destitución) presidencial planteadas por el escándalo de los relojes Rolex, protege a la jefa de Estado y 18 por ciento sostuvo que no lo hace.

Por otra parte, el programa periodístico semanal de televisión Cuarto Poder hizo una encuesta telefónica sobre si los televidentes creen que la presidenta Boluarte quiere colaborar con la Fiscalía o busca entorpecer la investigación del caso Rolex y 95 por ciento respondió que ella quiere obstruir las pesquisas y solo cinco por ciento dijo que colabora con las mismas.

De otro lado, el comentarista de televisión Nicolás Lúcar su sumó a las numeroas críticas a la presidenta que consideran inverosímil su explicación, dada en un mensaje por televisión el viernes útimo, de que los tres Rolex que usaba le fueron prestados por el gobernador de la región andina de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, su amigo.

Lúcar dijo que la mandataria miente y que esa declaración evidencia que trata a los peruanos como idiotas y está dispuesta a cualquier cosa para mantenerse en el cargo hasta 2026, cuando fenece el mandato quinquenal de Pedro Castillo, quien en diciembre de 2022 fue encarcelado y destituido tras intentar disolver el Congreso.

Según el analista, Boluarte continúa como presidenta por el apoyo del Parlamento y debe dejar el cargo no solo por el escándalo de los relojes, sino también porque está al frente de un gobierno de gente no calificada y que no respeta a los ciudadanos.

Criticó también al Congreso por negarse a viabilizar nuevas elecciones generales, para lo cual alega que si eso ocurre habrá caos y “se acabará el mundo”, lo cual calificó como un chantaje y una mentira.

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