De acuerdo con la Dirección de Inteligencia del Ejército, la mayoría de los miembros de la banda de sirios que participaron en el secuestro y el crimen del funcionario Suleiman fueron arrestados.
Mediante un comunicado, la institución militar precisó que durante la investigación con los involucrados quedó claro que el secuestrado fue asesinado por ellos mientras intentaban robar su coche en la región de Jbeil, en la municipalidad de Biblos, y transportaron su cuerpo a Siria.
En este punto, el mando militar está coordinando con las autoridades sirias la entrega del cuerpo y completar las investigaciones bajo la supervisión de la fiscalía general.
Según el canal panárabe Al Mayadeen, el cuerpo del funcionario del partido Fuerzas Libanesas fue trasladado a un hospital en Siria, luego de ser encontrado en las afueras de la localidad fronteriza de Zeta.
Al respecto, informó de la realización de coordinaciones, a través de la Cruz Roja, para recibir y transportar el cadáver desde un hospital en Homs hacia Líbano.
En detalle, una fuente confirmó a la propia red comunicacional que tres sirios mataron a Pascal Suleiman por robo, mientras intentaba resistirlos, uno de ellos lo golpeó en la cabeza, provocando que se desangrara hasta morir.
La Dirección de Inteligencia del Ejército los arrestó en una zona fronteriza entre Siria y Líbano, en cooperación con las autoridades de Damasco; al mismo tiempo, el automóvil robado fue encontrado dentro de territorio de la vecina nación.
En este contexto, el primer ministro interino, Najib Mikati, pidió autocontrol, sabiduría y no dejarse arrastrar por rumores y emociones al ofrecer sus condolencias y condenar el crimen.
A propósito, el líder de la Corriente Marada, Suleiman Franjieh, manifestó que se trata de un acto criminal cobarde y exigió tomar todas las medidas legales, así como actuar con sabiduría y conciencia.
El Partido Socialista Progresista repudió el asesinato de Suleiman y llamó la atención sobre el peligro de arrastrar al país hacia consecuencias indeseables, tras ser testigos en el pasado de más de una década de guerra civil (1975-1990).
Por su parte, el ministro de Defensa, Maurice Slim, solicitó a todos los implicados ejercer autocontrol y subrayó que la justicia seguirá su curso a la luz de las investigaciones en curso.
En este escenario, el Partido Fuerzas Libanesas llamó a los servicios de seguridad y judiciales a investigar seria y profundamente a los detenidos por el crimen de Pascal Suleiman con el fin de esclarecer sus antecedentes.
A través de una declaración, consideró que la información filtrada hasta el momento sobre los motivos del asesinato no parece coherente con la verdad del asunto.
lam/yma
