Ello se produjo la víspera, un día después que la Corte Suprema de Arizona reviviera esa ley, que tiene 160 años de antigüedad, la cual fue aprobada antes de que Arizona se convirtiera en 1912 en estado y antes de que las mujeres de este país tuvieran el derecho al voto (1919).
La Corte Suprema de Arizona se pronunció también tras la declaración que hiciera el lunes Donald Trump, eventual candidato del Partido Republicano para la presidencia de Estados Unidos en las elecciones del 5 de noviembre.
Trump dijo en un video en su red Truth Social que la cuestión del aborto es privativa de los estados y rechazó una prohibición federal a esa práctica.
Ayer el exmandatario criticó el fallo del máximo tribunal de Arizona. Afirmó que fue “demasiado lejos”, pero mantuvo el postura de que es a los estados a los que corresponde decidir sobre esa cuestión.
El martes la Corte Suprema de Arizona rescató una ley aprobada por primera vez en 1864 que prohibirá prácticamente todos los abortos, renovando el debate sobre el tema en Estados Unidos.
La controvertida medida -que reposicionó el aborto en la agenda electoral- podría permitir el procesamiento de médicos u otras personas por interrumpir un embarazo, a menos que la vida de la madre esté en peligro. No incluye excepciones por violación o incesto.
Los demócratas culparon al expresidente por la pérdida de un derecho logrado en 1973 tras la sentencia de Roe vs. Wade, que dio luz verde al acceso legal y con protección a este procedimiento.
Sin embargo, en junio de 2022 la Corte Suprema, remodelada por Trump, quien nombró a tres de los jueces del tribunal, puso fin al derecho al aborto garantizado a nivel federal y dejó abierta la posibilidad de la aplicación de leyes estatales como la de Arizona.
La decisión de reimponer «una ley de una época en la que Arizona no era un estado, la Guerra Civil estaba en pleno apogeo y las mujeres ni siquiera podían votar, pasará a la historia como una mancha en nuestro estado», dijo la fiscal general demócrata Kris Mayes.
Esta decisión podría favorecer políticamente al presidente Joe Biden, quien prometió restaurar Roe vs. Wade de ser reelecto. “Seguiremos luchando para proteger los derechos reproductivos y pediremos al Congreso que apruebe una ley que restablezca las protecciones de Roe v. Wade”, expresó en un comunicado poco después del fallo en Arizona.
Por su parte, la gobernadora demócrata del estado, Katie Hobbs, advirtió que esto “sólo sirve para crear más caos para las mujeres y los médicos en nuestro estado”.
Hobbs responsabilizó a los republicanos por un “ataque interminable a nuestros derechos básicos”.
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