De los 450 sistemas, 70 están siendo afectados por la escasez de agua, y entre los esfuerzos para revertir el panorama, el fundamental es aumentar el trasvase de ese líquido, afirmó el presidente interino de la NWC, Kevin Kerr.
Si la situación empeora, transferiremos el agua del Sistema Río Cobre y haremos más ajustes nocturnos. Continuaremos transportando camiones de emergencia a áreas que no pueden acomodar el suministro por tubería y, finalmente, introduciremos pozos para aumentar algunas fuentes existentes, dijo Kerr.
También advirtió que se implementarán restricciones al suministro de agua de Kingston y St. Andrew, en caso de que los niveles del embalse de Mona y la presa Hermitage caigan al 65 por ciento.
El 9 de abril, el nivel del agua en el embalse de Mona era del 77,1 por ciento, mientras que la presa del Hermitage estaba en el 79,1 por ciento, de acuerdo con reportes de la NWC.
Kerr informó que, durante el último período financiero, la NWC gastó unos 380 millones de dólares en el transporte de agua, y se prevé que en este período de sequía gaste 400 millones de dólares.
El presidente interino de la NWC instó a los ciudadanos y clientes a informar sobre las filtraciones a la comisión y a continuar almacenando y conservando agua.
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