Tenemos un optimismo moderado y queremos ser cuidadosos, pero a la vez estamos contentos, expresó el presidente de la Asociación de la Industria dedicada a ese rublo, Carlos Arias, citado por el diario local Prensa Libre.
Subrayó que influyó en el último resultado la baja del 19 por ciento en las importaciones de Estados Unidos, por lo que esperan un mejor 2024 para la economía de ese país.
Análisis indicaron una recesión a finales del 2023 e inicios del 2024 en ese territorio norteño, cuando no sucedió, reflexionó.
El presidente de la Asociación de la Industria dedicada al vestuario y textiles, entidad adscrita a la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), situó las expectativas para el presente período anual en mil 940,4 millones de dólares.
Tenemos un juego de situaciones económicas que creemos que van a beneficiarnos y también estamos muy optimistas sobre el 2025, acotó.
En enero de 2024, ejemplificó el funcionario, incrementamos las exportaciones totales nacionales en un 1,8 por ciento y las del sector en 0,4.
A ello se unió la existencia de nuevos compradores con órdenes de producción de diversas líneas, como prendas de vestir de tejido plano: ropa de trabajo o uniformes, y más deportiva y atlética.
Tras dos años récord, la cifra de ventas internacionales en 2023 se situaron en mil 848,8 millones de dólares, según los reportes.
En la etapa del inicio de la pandemia de la Covid-19 solo se enviaron mil 447,8 millones de dólares, una baja del 11,9 por ciento, detalló Arias.
Sin embargo, remarcó, en 2021 registramos ventas al exterior por mil 932,8 millones, con crecimiento de 33,5 por ciento, y en el siguiente se ubicaron en un monto de dos mil 257,4 millones, un alza de 16,8.
Esta industria chapina del 2020 al 2023 recibió inversiones por 250 millones de dólares y 26 empresas extranjeras manifestaron su interés de instalarse en Guatemala.
Acorde con información de la Agexport, 15 ya tienen algún nivel de avance en sus análisis y, de concretarse, incorporarían otros 200 millones.
El sector atiende actualmente empresas de China, Colombia, India, Siri Lanka, Corea, Estados Unidos, Taiwán y Vietnam.
La tierra del quetzal cerró el pasado año con un crecimiento del producto interno bruto de 3,5 por ciento y para 2024 estima una subida en el rango de 2,5 al 4,5 con un valor central o núcleo de 3,5 por ciento que se mantiene.
Informes del Banco Central indican que las remesas constituyen el principal motor de la economía, bien por delante de vestuario y textiles, café y banano.
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