El primer ministro del país caribeño, Ralph Gonsalves, afirmó que apoya los reclamos presentados por la administración de su homólogo Andrés Manuel López Obrardor ante la Comunidad de Estados Americanos y Caribeños (Celac), Naciones Unidas, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y otros foros.
Las acciones de Ecuador –enfatizó- han sido ilícitas y violatorias de la ley internacional, de la soberanía de México y de las normas relacionadas con la inviolabilidad de los espacios diplomáticos y sus alrededores.
Gonsalves consideró necesario tomar acciones correctivas para regresar el status quo, se haga valer el derecho de asilo otorgado al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas y permitirle volver a la embajada mexicana.
“No podemos permitir que esta ilegalidad se lleve a cabo. Estoy pidiendo a Ecuador que haga lo correcto”, subrayó y advirtió que si Quito persiste en mantener su actual postura, deberá entonces afrontar la respuesta de todos los gobiernos del mundo que se mantendrán firmes en el principio del derecho internacional.
Finalmente, el mandatario antillano expresó respaldo al discurso del presidente de Colombia, Gustavo Petro, y a su “lenguaje fuerte” al abordar el tema, pues aseguró que se justifica dado la gravedad de los hechos y sus consecuencias para las normas de la comunidad global.
Gonsalves intervino en la reunión extraordinaria entre los jefes de Estado y de Gobierno de la Celac, que sesiona de forma virtual y con Honduras a la cabeza para analizar la crisis diplomática entre México y Ecuador.
El conflicto estalló cuando el pasado 5 de abril la policía ecuatoriana ingresó por la fuerza a la embajada mexicana para capturar a Glas, quien solicitó previamente asilo político al gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
La Celac primero analizó la situación en un encuentro de la troika (Honduras, Colombia y San Vicente y las Granadinas) y luego en otro a nivel de cancilleres, quienes reiteraron sus condenas individuales a la violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y a las Normas de Asilo de la Convención de Caracas.
Sobre Glas pesa una orden de aprehensión en su país por presunta malversación de fondos en la reconstrucción de dos provincias afectadas por un sismo.
Aparte de la repulsa internacional al suceso, México y también Nicaragua rompieron relaciones con Ecuador, se presentó una demanda ante la CIJ contra Quito y Colombia prometió acciones para que la Corte Interamericana de Derechos Humanos expida medidas cautelares en favor de Glas.
Otros organismos de la región igualmente convocaron a encuentros de urgencia con ese tema en agenda y las consecuencias para Ecuador, que podría enfrentar sanciones.
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