La reunión, que contará con la presencia del presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, abordará el suministro de municiones y de sistemas antiaéreos a Kiev, indicó Stoltenterg en una conferencia de prensa en esta urbe.
El presidente Zelensky solicitó realizar una reunión del Consejo OTAN-Ucrania, confirmó el funcionario noruego.
Stoltenberg declaró que las naciones de la alianza atlántica poseen una cantidad suficiente de armas antiaéreas como para ofrecerle parte de ellas a Ucrania, cuyo mandatario insiste en solicitar la entrega de un mayor volumen de armamentos de parte de Occidente.
La realidad es que contamos con sistemas antiaéreos y son suficientes para enviar mucho más a Ucrania, sobre todo, cuando se trata de los complejos estadounidenses Patriot, señaló el secretario general de la alianza atlántica.
El anuncio de la reunión del consejo OTAN-Ucrania coincide con la primera de dos jornadas de una cumbre de la Unión Europea, también en esta capital, para abordar la crisis levantina, el conflicto ucraniano y los desafíos para Europa de aumentar su competitividad económica.
De acuerdo con el diario Financial Times, existe reticencia de varios estados europeos para suministrar baterías Patriot a la república exsoviética, mientras la jefatura del bloque noratlántico ejerce presión, en especial, sobre España, Rumania y Polonia en ese sentido.
Ucrania recibió más de 165 mil millones de dólares en armamentos desde que el 24 de febrero de 2022 el presidente Vladimir Putin ordenó una operación bélica para proteger la región sublevada del Donbás, así como para desmilitarizar y desnazificar al vecino país.
Sin embargo, Kiev fracasó en el lanzamiento de al menos dos grandes contraofensivas desde entonces, mientras que el ministerio ruso de Defensa señala que en la confrontación Ucrania perdió más de 450 mil militares, aunque Zelensky apenas reconoce unas 30 mil bajas fatales.
Además, las potencias occidentales enviaron a Kiev tanques modernos de Alemania, Reino Unido y Estados Unidos, así como vehículos blindados, cañones autopropulsados, baterías Patriot y otros armamentos. En todos los casos Moscú reportó la destrucción de varios de ellos.
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