Así lo consigna su director, el doctor Carlos Kierszenbaum, al conmemorarse el Día Internacional de la Lucha contra el Maltrato Infantil.
El especialista tiene más de 20 años atendiendo casos que precisan de cirugías en el «Hospital de Niños Pereira Rossell», de esta capital.
Desde allí constató la cada vez más recurrente llegada de menores de 15 años heridos de bala.
Según Kierszenbaum, la situación “pasó de ser un fenómeno casi anecdótico en la vida quirúrgica de un cirujano pediátrico a ser algo frecuente”, también en otras instituciones de salud.
Ello ha llevado a que el personal sanitario se prepare para tales contingencias y a la elaboración del trabajo académico titulado “Heridas por arma de fuego. Un tema emergente que el Pediatra debe conocer”.
El estudio fundamenta que Uruguay está entre los 10 países del mundo con más armas de fuego cada 100 habitantes.
Datos recogidos recientemente por el Departamento de Emergencia Pediátrica del Pereira Rossell registran promedio de “una consulta cada 27 días” por menores heridos por arma de fuego, “causa importante de mortalidad”, señala la investigación.
Antes la mayoría de esas lesiones se producían por accidentes domésticos, o de caza, con armas de fuego; hoy los heridos de bala se producen por situaciones de violencia”, indica Kierszenbaum.
Subrayó que si bien en “oportunidades los niños son víctimas colaterales de episodios de violencia” también se han visto casos en que muchas veces se le agrede para darle un mensaje a los padres; además a los casos vinculados a menores infractores.
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