De acuerdo con los datos de una investigación periodística de la organización internacional Lost in Europe, publicados este jueves en el sitio digital del diario La Stampa, esta nación encabeza el denominado viejo continente respecto a esas evanescencias, que a nivel regional sumaron 51 mil 439 en esos tres años.
Un estudio similar realizado por esa agrupación en 2021, mostró que entre 2018 a 2020 los niños inmigrantes no acompañados desaparecidos sumaban unos 18 mil, lo que evidencia un sustancial incremento, destaca ese análisis.
Otro informe divulgado el pasado 6 de marzo por la comisaria extraordinaria de Italia para personas desaparecidas, María Luisa Pellizzari, precisó que durante 2023 desaparecieron en este país 17 mil 535 menores extranjeros, cifra superior a los 13 mil del año anterior.
Los mismos proceden principalmente de Túnez, con tres mil 362, así como de Egipto, con dos mil 861; Guinea, con dos mil 589; Costa de Marfil, con mil 572 y Afganistán, con mil 106.
La mayoría eran jóvenes de 17 años, para un total de seis mil 146 personas de esa edad, y se presume que muchos escaparon de los refugios y abandonaron Italia para reunirse con familiares y amigos en otros países, principalmente del norte de Europa.
Pellizzari señaló, al dar a conocer ese documento, que la actividad de la oficina que dirige se orienta “hacia un enfoque interdisciplinario y multisectorial, para abordar un fenómeno que resulta muy complejo y que suscita preocupación y alarma en la opinión pública”.
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