Situada entre las provincias sureñas de Azuay y Cañar, la represa Mazar posee la mayor capacidad de almacenamiento del país y abastece de energía a otras centrales como Molino y Sopladora.
Durante el recorrido, el mandatario constató cómo las precipitaciones de las últimas semanas conllevaron a una recuperación significativa de la presa.
El ministro encargado de la cartera de Energía y Minas, Roberto Luque, informó al gobernante que el nivel del agua aumentó alrededor de 18 metros, que representan el 35 por ciento del volumen útil.
“Si seguimos a este ritmo, podríamos llegar en un mes y medio o dos a recuperar el embalse por completo», destacó Luque.
Tras el recorrido, las autoridades mantuvieron una reunión para revisar próximas acciones estratégicas, entre las que están gestionar los mantenimientos preventivos y correctivos en el complejo hidroeléctrico de Mazar, Molino y Sopladora, explicó el ministro.
El pasado domingo, el funcionario anunció que los apagones continuarán suspendidos en el territorio nacional hasta el domingo 12 de mayo, aunque aclaró que la crisis continúa.
A su vez, la Comisión de Fiscalización de la Asamblea citó para el lunes venidero a Luque y a la exministra del sector Andrea Arrobo, quien fue denunciada ante la Fiscalía General por el gobierno de Noboa por paralización de un servicio público y traición a la Patria.
Aunque ya ningún representante del Ejecutivo lo menciona, a mediados de abril, el entonces secretario de Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, afirmó que la crisis del sistema energético se debía a posibles actos de sabotajes por parte de funcionarios, incluida Arrobo.
«Dejaron correr el agua, se abrieron las compuertas de Mazar”, dijo Izurieta, una teoría que especialistas descartaron y consideraron imposible.
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