Conjunta con el Departamento de Investigaciones Criminales (CID) y las Unidades de Inteligencia, la operación está dirigida a arrestar a aquellas personas involucradas en el envío de soldados retirados al campo de batalla en el país europeo, dijo a Adaderana el secretario de Defensa, general (Rtd), Kamal Gunaratne.
Subrayó que son agentes de empleo extranjeros ilegales, dedicados a la trata de personas, que defraudan dinero con el pretexto de proporcionar empleo en los respectivos ejércitos.
Entre sus promesas se encuentran la concesión de tierras en zonas populares de esos países, la ciudadanía para sus familias y más de un millón de rupias srilankesas en efectivo, es decir alrededor de tres mil 400 dólares, de acuerdo con Gunaratne.
Sin embargo, explicó, no proporcionan dinero ni pagan salario alguno y en los casos de muerte o lesión grave, los afectados o sus familiares no reciben ninguna compensación.
Engañados por esas falsas promesas, un número significativo de militares retirados se aventuraron al frente de guerra de Ucrania, donde algunos perdieron la vida, otros resultaron heridos y hay quienes su paradero resulta desconocido, confirmó el militar srilankés.
Estamos trabajando de manera diligente para identificar a los individuos responsables, pues actúan de manera ilegal y reclutan a los veteranos no como soldados legítimos sino como mercenarios, subrayó.
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