En un comunicado oficial, la Cancillería española significó que marchan bien las conversaciones, las cuales, subrayó garantizará los derechos de los trabajadores transfronterizos tanto de los actuales como de los futuros.
Durante sendas reuniones de trabajo en torno a la marcha de las negociaciones sobre Gibraltar, Alabares analizó la situación.
En la primera cita convocó a autoridades municipales y autonómicas, y la segunda, a agentes sociales y económicos de la comarca.
Estos encuentros se han realizado “con un espíritu de lealtad institucional y transparencia” y con el objetivo de informarles sobre los avances del acuerdo y “escuchar sus demandas y observaciones”, comentó el jefe de la diplomacia española.
Aprovechó para detallar los progresos en la reunión de alto nivel mantenida el pasado 12 de abril en Bruselas con el vicepresidente de la Comisión Europea, Maros Sefcovic, y el canciller británico, David Cameron.
Fue la primera en ese formato y se acordaron líneas políticas generales, incluyendo sobre el aeropuerto, bienes y movilidad.
Refirió que se conversa en torno a la eliminación de la Verja (punto de control militar británico), el uso del aeropuerto, la libre circulación de personas y mercancías, los derechos de los trabajadores del campo y la salvaguarda de la posición de España sobre la soberanía.
Albares recalcó que se busca crear “una zona de prosperidad compartida” y “abrir una nueva etapa de convivencia entre el Campo de Gibraltar y Gibraltar después de tantos años”.
El objetivo, apuntó, es que esas estrechas relaciones económicas, comerciales y personales, que en la comarca son “normales de hecho”, lo sean también “de derecho y se eliminen incidentes y desconfianzas”.
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