El proyecto de ley también trata sobre eficiencia y calidad. La prestación de asistencia en este país está actualmente fragmentada, es insostenible e inaceptable”, afirmó Ramaphosa en la ocasión.

El NHI, resaltó el presidente, es un instrumento importante para abordar la pobreza.

El creciente costo de la atención médica empobrece a las familias, argumentó. “Por el contrario, la atención sanitaria proporcionada a través del NHI libera recursos en las familias pobres para otras necesidades esenciales”.

La forma en que se pagarán los servicios sanitarios pretende contener los costes sanitarios integrales y garantizar que los recursos disponibles se utilicen de forma más eficiente, explicó.

En sus palabras, Ramaphosa describió la firma pública del proyecto de ley NHI como un momento crucial y un hito en la búsqueda continua de Sudáfrica de una sociedad más justa.

Al abordar críticas de la oposición a la Ley, el mandatario sudafricano dijo que el desafío en la implementación del NHI no radica en la falta de fondos, sino en la mala asignación de recursos que actualmente favorece al sector de salud privado a expensas de las necesidades de salud pública.

También explicó que el Fondo NHI contratará servicios de proveedores de servicios públicos y privados para garantizar que todos los sudafricanos tengan acceso a una atención sanitaria de calidad.

La implementación efectiva del NHI, enfatizó, depende de la voluntad colectiva del pueblo sudafricano. Todos debemos abrazar un futuro en el que la atención médica sea un tesoro nacional compartido, que refleje la dignidad y el valor que otorgamos a cada vida sudafricana.

De su lado, la confederación de sindicatos de Sudáfrica, Cosatu, acogió con satisfacción la firma del proyecto de ley NHI por parte del Presidente, calificando la medida como una importante intervención de transformación por parte del Estado desde 1994.

Al respecto, el coordinador parlamentario de Cosatu, Matthew Parks, sostuvo que es hora de que Sudáfrica se aleje del legado del apartheid de acceso desigual a la atención médica, que tiene un costo terrible para las comunidades y familias de la clase trabajadora.

rgh/mv