El incremento de las tarifas fue suspendido por la Justicia, pero la jueza Elena Liberatori dio marcha atrás a esa decisión y desde esta jornada un boleto en el subterráneo capitalino pasó de valer 125 pesos argentinos (0,15 dólares) a 574 (0,67).

Además, el 1 de junio aumentará a 650 (0,76 dólares) y en agosto a 757 (0,88).

Dentro de tres meses, quienes no tengan registrada la tarjeta utilizada para abonar el pasaje deberán pagar 859,07 (un dólar), lo cual suma otra preocupación para quienes usan ese medio de transporte a diario y en más de una ocasión por jornada.

En un comunicado, la Agtsyp señaló que, pese a los constantes incrementos, el servicio es cada vez peor.

En las últimas semanas vimos cómo los usuarios tuvieron que ser evacuados por las vías por desperfectos en los trenes y desde hace tiempo los trabajadores exigimos la compra de formaciones nuevas e inversiones para todas las líneas, indica el mensaje.

Además, reiteró la denuncia por la presencia del material cancerígeno asbesto, que afecta a empleados y ciudadanos.

La organización sindical publicó un video donde se observan estaciones inundadas, fuera de funcionamiento, con presencia de ratas, cortes eléctricos, derrumbes e incendios.

El transporte es un derecho, viajar seguros también, concluye el texto.

De acuerdo con el Instituto de Estadísticas y Censo, esta nación registró en abril una variación interanual del Índice de Precios al Consumidor de 289,4 por ciento y en los meses transcurridos de este año acumula una inflación de 65.

Desde su llegada al Gobierno, La Libertad Avanza aplicó un fuerte ajuste, una devaluación de 118 por ciento del peso argentino y el incremento considerable y continuo de los servicios básicos.

mem/gas