El portavoz adjunto del secretario general (António Guterres), Farhan Haq, advirtió sobre el sufrimiento de las poblaciones desplazadas tras los más recientes ataques de las bandas armadas, que mantienen al país sumido en el caos.
Por su parte, la coordinadora humanitaria de la ONU en la nación, Ulrika Richardson, consideró inaceptable que las personas y los niños sean el objetivo de las pandillas.
Las escuelas y hospitales son saqueados y destruidos por las bandas armadas, reclamó la representante en un comunicado divulgado aquí.
De acuerdo con el organismo, unas 360 mil personas permanecen fuera de sus hogares, la mayoría de ellas mujeres y niños, incluidas más de 160 mil haitianos en Puerto Príncipe.
“Muchas familias han sido desplazadas varias veces y los recientes ataques coordinados contra los barrios de Delmas y Gressier (en la capital) el 25 de abril desplazaron a otras 10 mil personas”, dijo el portavoz adjunto a la prensa.
En tanto, el Programa Mundial de Alimentos anunció que dos mil 900 pobladores en Gressier recibirán comidas calientes diarias durante dos semanas tras las evaluaciones.
Esa agencia mantiene sus distribuciones de alimentos en Cité Soleil, uno de los barrios más vulnerables y pobres de Puerto Príncipe.
La ONU estima que al menos 5,5 millones de haitianos necesitarán asistencia humanitaria en 2024, lo que supone un aumento respecto de los 5,2 millones estimados antes por la Organización.
La situación muestra además de una carga desproporcionada en las mujeres, luego de que los índices de violación se dispararan a causa de las condiciones inseguras en muchos sitios de desplazamiento.
Como respuesta, las organizaciones humanitarias organizan actividades de prevención y sensibilización; al tiempo que identifican a los sobrevivientes y se aseguran de que reciban la atención adecuada.
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