Así lo ratificó una fuente oficial de alto rango a la televisora Al Qahera, que también negó reportes de la prensa israelí sobre la supuesta decisión de El Cairo de abandonar el plan.
Egipto está decidido a adoptar todas las medidas necesarias para condenar las practicas israelíes ante la CIJ, detalló la fuente, sin proporcionar más detalles sobre la naturaleza de los procedimientos ni el momento de su inicio.
El pasado domingo, este país anunció que se sumaría a la demanda sudafricana.
La Cancillería explicó en un comunicado que la decisión “se produce a la luz de la creciente gravedad y alcance de los ataques israelíes contra civiles palestinos en ese enclave costero”.
Tales incursiones incluyen ataques deliberados contra civiles, destrucción de infraestructuras, desplazamientos forzados y la creación de condiciones de vida insoportables, lo que lleva a una crisis humanitaria sin precedentes, precisó la nota.
El Ministerio de Relaciones Exteriores consideró que estas acciones constituyen una violación flagrante del derecho internacional y el Cuarto Convenio de Ginebra de 1949 sobre la protección de los civiles en tiempos de guerra.
Asimismo, instó a Israel, como potencia ocupante, a cumplir con sus obligaciones sobre el tema.
A finales del pasado año, Sudáfrica acusó en la CIJ a Israel de violar la Convención de las Naciones Unidas sobre Genocidio de 1948.
A principios de este mes, el Ejército israelí lanzó una ofensiva terrestre contra la sureña ciudad de Rafah, donde se refugiaban más de un millón de palestinos, de los cuales al menos 800 mil abandonaron la zona en los últimos días.
La urbe es fronteriza con Egipto, lo cual provocó tensiones con las autoridades de este país, que temen una avalancha de refugiados.
Al intervenir el jueves último en la cumbre árabe, celebrada en Manama, el presidente egipcio, Abdel Fattah El-Sisi, criticó duramente a la vecina nación.
El-Sisi condenó las matanzas y el asedio al que es sometido la población de ese territorio, así como el uso del hambre como arma de guerra y los planes de desplazamiento forzoso.
Los derechos de los niños, decenas de miles de los cuales fueron asesinados y quedaron huérfanos en Gaza, seguirán siendo una espada desenvainada sobre la conciencia de la humanidad hasta que se haga cumplir la justicia, recalcó.
Rechazamos de forma total cualquier plan para desplazar por la fuerza al pueblo palestino o de crear las condiciones para hacer imposible la vida a los habitantes de la Franja con el fin de obligarlos a huir, expresó.
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