La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) precisó en la mañana que proseguía en el combate de 111 siniestros, unos de forma aérea por sus considerables proporciones y otros por tierra con personal comunitario.
De los primeros, en Yesal Burral del Parque Nacional Laguna del Tigre, área protegida ubicada en el municipio de San Andrés, en el departamento de Petén, parte de las zonas núcleos de la reserva de la biosfera maya.
La entidad coordinó acciones de respuesta a las llamas reportadas asimismo en la finca El Norte del municipio de San Pedro Pinula, Jalapa, al tiempo de la comunidad Nueva Jerusalén Paraxte, El Estor, Izabal.
Reportó el sobrevuelo de un dron para evaluar el área afectada y así continuar con la fase de liquidación del siniestro en cerro Xucub’ Tzul, área del puente de Semuc Champey, Lanquín, Alta Verapaz, la cual concretó hace pocas horas.
También controló y liquidó en su totalidad un incendio forestal registrado en caserío Candelaria uno del municipio de Panzós Alta Verapaz, Sierra de Las Minas.
El estructural registrado en barrio El Porvenir, Sayaxché, Petén, así como uno entre árboles de la aldea Sab Rabinaq Grande, Chicamán, Quiché y un tercero de pastizal en Brecha de Carranza, San Juan Sacatepequez, de esta capital.
Autoridades describieron que algunos incendios son provocados para destruir el bosque dentro de las áreas protegidas y apropiarse de la tierra.
Estos siniestros llevaron a la muerte de muchas especies de flora y especialmente de fauna como tortugas, serpientes y monos, entre otras.
De los dos mil 343 incendios contabilizados en Guatemala hasta este lunes, mil 889 fueron forestales y 454 no forestales, puntualizó la Conred, que agregó 40 mil 747 hectáreas afectadas en total a nivel nacional.
En el conteo de la temporada desde noviembre pasado hasta junio próximo, destacan Petén con 407, Quiché 307, esta urbe con 303, Huehuetenango (200) y Jalapa 136.
Mientras tanto, los daños más severos se dieron en Huehuetenango con 17 mil 473 hectáreas consumidas por las llamas, seguido de Petén (13 mil 436) y Quiché con seis mil 552.
En la etapa anterior, la autoridad encargada contabilizó más de 850 quemas que impactaron una cifra superior a 28 mil hectáreas de bosques y pastos en Guatemala.
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