Entre enero y abril de este año se registraron 824 asesinatos frente a los 898 de la etapa anual pasada, precisó la Plataforma para la Comunicación de Datos Estadísticos de Incidencia Criminal, citada por el oficial Diario de CentroAmérica.
El director general de la Policía Nacional Civil (PNC), David Custodio Boteo, consideró que esta reducción se dio debido a la implementación de planes operativos dirigidos a combatir la delincuencia común y organizada.
En el marco de tales acciones, mencionó la detención de
14 mil 508 personas en los primeros cuatro meses del año, entre ellas más de 500 extorsionistas y sicarios, además de la incautación de mil 165 armas de fuego en el mismo lapso.
Incrementamos las medidas de seguridad y la presencia de las fuerzas policiales en los límites e ingresos de colonias y zonas con mayor número de pandilleros, subrayó el jefe castrense.
Ello nos permitió un aumento de las capturas y los decomisos de armas, argumentó Boteo, quien recordó que dos mil 400 nuevos agentes se graduaron a principios de 2024.
Los desplegamos en puntos estratégicos para controlar la delincuencia en departamentos como Escuintla, Izabal, Jutiapa, Santa Rosa, Chimaltenango y Sacatepéquez, así como en comisarías clave del distrito central, amplió.
El director general de la PNC enfatizó en la colaboración con el Ejército de Guatemala, que subió la presencia de fuerzas de seguridad en áreas fronterizas y de alta incidencia criminal.
Asimismo, agradeció la participación de la ciudadanía a través de organizaciones que promueven la denuncia y facilitan la labor policial.
Medios de prensa locales evaluaron antes, incluso, la situación en tal aspecto de enero, febrero y marzo de 2015 y así hasta 2024, en tanto remarcaron que esta última fue la menos violenta.
El investigador del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac), Lizandro Acuña, valoró, por su parte, de positivas las estadísticas y reconoció los esfuerzos del Ministerio de Gobernación.
Señaló, sin embargo, que persisten desafíos como los robos, hurtos y asaltos, por lo que recomendó un mayor enfoque en inteligencia e investigación para desarticular grupos criminales.
Advirtió que la criminalidad no solo debe ser combatida con represión, sino también con soluciones integrales, mediante políticas públicas dirigidas a la prevención, rehabilitación y reinserción social.
Uno de los principales retos del Ejecutivo de Bernardo Arévalo, según analistas políticos, resulta la lucha contra el crimen organizado y la violencia en todo este territorio centroamericano.
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