El alto representante reconoció el liderazgo del mandatario en el que consideró como un momento difícil para el país, la región y el mundo.

Raisi, víctima de un trágico accidente aéreo, falleció luego de la caída del helicóptero en que viajaba poco después del reunirse con su homólogo azerbaiyano.

Ambos líderes habían inaugurado la presa de Qiz Qalasi, el mayor proyecto hídrico conjunto entre los dos países.

«En estos tiempos difíciles, la cooperación internacional y regional es más necesaria que nunca», reconoció al respecto el titular de la ONU.

Guterres consideró fundamental esa relación para generar confianza, prevenir conflictos y resolver disputas.

«Deseo asegurar que las Naciones Unidas se solidarizan con el pueblo iraní y en la búsqueda de la paz, el desarrollo y las libertades fundamentales», subrayó.

Raisi tomó posesión como el octavo presidente de la República Islámica el 3 de agosto de 2021 tras obtener el 61,95 por ciento de los votos.

Bajo su mandato, Irán desarrolló una política exterior fuerte, encaminada a recobrar su papel como actor central en la región, comprometido con la buena vecindad y el respaldo a la causa palestina.

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