Elecciones generales y sus perspectivas en Panamá

Ciudad de Panamá, 2 jun (Prensa Latina) A menos de un mes que se instale el nuevo Ejecutivo en Panamá, encabezado por el presidente electo José Raúl Mulino, la gobernabilidad pasa hoy por la Asamblea Nacional (parlamento unicameral).

Analistas como Ramiro Guerra, de El Periódico de Panamá, estiman que ya se perciben maniobras para ver quién se alza con el control de ese órgano del Estado, que también se instalará el próximo 1 de julio.

De forma temprana, según el comunicador, Mulino tendió puentes al movimiento Vamos que respalda a los llamados diputados independientes y se esperan reuniones con otras bancadas, incluso con la del gobernante Partido Revolucionario Democrático, sus mayores adversarios.

“En este escenario, hay cables cruzados y pelados, que veremos correlaciones de fuerza donde tirios y troyanos, procurarán un compás, no necesariamente favorable al Ejecutivo”, según Guerra.

Para el estudioso, el padrino de Mulino el expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014), condenado a más de 10 años de cárcel por blanqueo de capitales y ahora asilado en la embajada de Nicaragua, juega su propio partido.

Luego de la instalación del Legislativo, a las nuevas autoridades les vienen grandes desafíos por algunos proyectos de leyes que están en ciernes, como los referentes a la Caja de Seguro Social o posibles negociaciones con la trasnacional canadiense First Quantum, como lo han señalado algunos asesores del Gobierno, con la idea de abrirla y después cerrarla.

Mulino se reunió recientemente con la alianza de independientes Vamos, que logró mayor cantidad de curules (20) en el pleno de cara al debate sobre las figuras del Contralor y el Procurador de la Nación.

A saber, tanto los diputados por libre postulación como los afiliados al partido a partir de un mes oficialista como Realizando Metas (RM) son las dos bancadas legislativas que, por ahora, se disputan las riendas del parlamento.

De acuerdo con fuentes de varias bancadas, la fracción de Vamos podría alzarse con unos 40 votos el próximo 1 de julio, lo que le daría una ventaja sobre RM, que ese día pasaría a ser la fracción oficialista.

En estas conversaciones, la bancada independiente de Vamos tiene claro lo que quiere: dirigir la Asamblea, así como las comisiones permanentes con mayor relevancia. Si se hace con la mayoría, le corresponderá liderar todos esos espacios.

A un mes de que se instale la Asamblea otro factor que podría definir la mayoría de una u otra bancada es que las impugnaciones presentadas contra varios diputados ante los juzgados del Tribunal Electoral sean resueltas antes de la instalación del plenario.

rgh/ga

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