Según comunicó, serán seis compañías las que participarán en el proceso y los beneficiados serán los hogares de los estratos 1, 2 y 3, definidos por el Estado como aquellos con usuarios de menores recursos, y por lo tanto elegibles para ser beneficiarios de subsidios en relación a los servicios públicos domiciliarios.

El convenio consiste en que las comercializadoras aplicarán una reducción en las tarifas de energía de forma inmediata, mientras que el Gobierno asumirá la llamada “opción tarifaria” en los segmentos poblacionales anteriormente mencionados.

“La determinación del presidente Gustavo Petro ha sido asumir la opción tarifaria, que fue una deuda que les quedó a los hogares colombianos en las facturas de energía después de la pandemia de Covid-19 por decisiones del gobierno anterior, como una deuda pública”, detalló el ministro.

Para lograr ese propósito explicó que en una primera fase se entregarán unos créditos que ya estaban en curso a través de la banca pública.

Esos créditos tienen unos periodos de gracia, de tal manera que las empresas no tengan que hacerles ese cobro a las familias, refirió Camacho.

Reveló asimismo que el próximo 20 de julio se radicará un proyecto en el Congreso para lograr que esa deuda la asuma el Estado.

También agregó que los alivios en los costos de la energía, dependiendo de la empresa y del mercado, oscilarán entre un cuatro y un 20 por ciento.

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