Estos opioides son conocidos como nitazenes y llevan ya algún tiempo en uso en Europa y América del Norte, así como en Asia, donde se han asociado con muertes por sobredosis.
Según un informe centrado en Sierra Leona y Guinea-Bissau por la Iniciativa Mundial contra la Delincuencia Organizada Transnacional, en ambos países fueron descubiertas muestras que contenían nitazenes.
El documento señala asimismo que algunos de estos opioides pueden ser hasta 100 veces más potentes que la heroína y hasta 10 veces más potentes que el fentanilo, lo que aumenta el riesgo de sobredosis y muerte.
Las investigaciones sugieren que los nitazenes están siendo importados a Sierra Leona desde otros lugares e instaron a los funcionarios a desplegar equipos de vigilancia en los mercados de drogas ilícitas y elaborar respuestas basadas en pruebas.
El Presidente de Sierra Leona, Julius Maada Bio, declaró recientemente una emergencia nacional sobre el uso indebido de drogas, en respuesta a los devastadores impactos de esas sustancias nocivas.
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