El parte oficial identifica a la víctima como Juliana Gle Tourneau, quien fue despedida del vehículo en el cual esperaba el paso de una manada de paquidermos en el puente Cultural Maramba, provincia Sur, una de las seis en las que está dividida Zambia.
Además de provocar la caída de la turista de 64 años, el elefante la pisoteó en una explosión de ira no provocada, según las investigaciones del suceso.
Es probable que el animal, un macho joven, estuviera en celo, fase cuando se tornan agresivos, estiman testigos que dicen haber observado secreción en las orejas del paquidermo, indicio de que se encuentran en fase de cortejo y tratan de aparearse.
De inmediato las autoridades advirtieron a los turistas ejercer máxima cautela en las proximidades de los animales.
En marzo pasado otro súbito estadounidense pereció en circunstancias similares.
Años atrás Zambia fue el refugio de cientos de ejemplares de la fauna asustados por el tronar de la artillería durante las guerras de liberación en Angola y Mozambique, así como las acciones de los guerrilleros namibios contra los ocupantes surafricanos.
Ese flujo, además de las medidas de protección contra los traficantes de marfil favoreció un aumento exponencial de la población de paquidermos al cual ambientalistas y gobiernos en un esfuerzo mancomunado buscan solución en la actualidad.
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