Medios locales reportan que hasta este domingo 23 de junio la producción de crudo disminuyó a 392 mil 730 barriles diarios de petróleo, es decir, 92 mil 803 barriles menos que el pasado 16 de junio, último día en que funcionó el OCP con normalidad.
La estatal Petroecuador declaró un estado de «fuerza mayor» en las exportaciones y notificó a sus clientes de esta decisión para evitar multas y sanciones por los retrasos en los envíos.
La compañía también anunció que puso en marcha un plan de contingencia desde el 17 de junio de 2024 que incluye el almacenamiento de petróleo y apagado de pozos petroleros.
La producción también se vio afectada el miércoles de la semana pasada, cuando el país sufrió un apagón nacional, que provocó la paralización de varios pozos.
El portal de noticias Primicias señaló que las refinerías de Esmeraldas y La Libertad redujeron sus operaciones, debido a la falta de petróleo.
El OCP transporta el 40 por ciento del petróleo ecuatoriano y aunque gran parte está bajo tierra, unos 140 metros del ducto quedaron expuestos al aire en la margen izquierda del río Coca, en la provincia de Napo.
La empresa administradora del OCP, privada, anunció que prevé construir un “bypass” en ese tramo para retomar las operaciones, aunque no informaron cuándo podría ocurrir eso.
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