La representante de ese organismo en Chad, Laura Lo Castro, brindó información en video conferencia desde esta capital, donde señala que la temporada de lluvias empezó en el este de Chad, región donde las precipitaciones dejan a menudo inundaciones catastróficas y hacen intransitables las carreteras y limitan el acceso humanitario.
La funcionaria agregó que esta situación de emergencia empeora por la llegada constante de refugiados sudaneses ante la intensificación de los combates en la región fronteriza de Darfur, que enfrenta una nueva escalada de violencia.
Lo Castro señaló también que muchos de ellos se encuentran atrapados actualmente en peligrosas áreas fronterizas de Chad, y Acnur no los puede reubicar en zonas más seguras por carecer de los recursos para ello.
En el este de Chad, una de cada tres personas es un refugiado, lo que constituye una situación insostenible para esa nación, que ya de por si es considerada entre las más pobres del mundo.
En enero pasado, el Programa Mundial de Alimentos advirtió que 1,4 millones de personas en Chad estarán privadas de ayuda alimentaria y nutricional de emergencia, debido a recortes financieros.
Ese organismo de Naciones Unidas valoró en un breve comunicado que tal situación resulta preocupante ya que podría agravar la crisis alimentaria existente en este territorio de África Central, con una población superior a 17 millones de habitantes.
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