Elaborado a partir de inteligencia artificial y datos sísmicos, el modelo se materializò con la colaboraciòn de expertos de Chile, Argentina y Nueva Zelanda.
Para ese trabajo estudiaron estadísticas de varios años, con especial énfasis en las 48 horas previas a seis pulsos eruptivos en el volcán Copahue, ubicado en la Región del Biobío, en la frontera entre Chile y Argentina.
Lo que hicimos fue tomar esos datos, procesarlos y luego ingresarlos en un programa de aprendizaje de máquina para que pudiera identificarlos, dijo Cabrera, investigador de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la citada universidad.
De las seis erupciones analizadas, cinco pudieron ser pronosticadas correctamente, precisó un comunicado de la casa de estudios.
Sobre la posibilidad de transferir el sistema a otras instituciones, dijo Cabrera que están trabajando con especialistas del Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur en su futura implementación para analizar otros macizos en el país, como el Lascar.
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