En la continuación de los contactos diplomáticos y reuniones en el Palacio de Gobierno, Mikati indicó que es sorprendente como el enemigo intimida con una agresión sin conocer todas las circunstancias de lo sucedido el sábado último en el incidente de Majdal Shams, en el Golán sirio ocupado.

Al mismo tiempo, el jefe del Ejecutivo denunció el cinismo de Tel Aviv al llorar a víctimas árabes en una región ocupada cuando mata, destruye y obliga al desplazamiento a los palestinos.

En este sentido, la máxima figura del gabinete libanés enfatizó que la intimidación de una guerra no disuadirá a los libaneses de proteger la nación por todos los medios aprobados a nivel internacional.

Según reseñó el gobierno levantino en X, esta posición fue comunicada a todos los amigos del Líbano en el mundo y a la Unión Europea; en tanto, las acusaciones israelíes serán respondidas en una carta detallada dirigida al Consejo de Seguridad de la ONU».

Mikati agradeció «a los países árabes y extranjeros que expresaron su solidaridad con Líbano, así como los esfuerzos para detener la agresión israelí contra los pueblos de la región.

En este contexto, consideró que la guerra psicológica emprendida por el enemigo tiene como objetivo ante todo socavar la moral de los libaneses, especialmente en plena temporada turística que conlleva muchas esperanzas e indicadores positivos.

Subrayó que «el gobierno está presente con todos sus ministerios y agencias para afrontar cualquier emergencia, pero las medidas necesarias se están tomando de manera que no causen pánico entre los ciudadanos.

A propósito, explicó que el Comité de Emergencia Nacional, formado por el Consejo de Ministros en los primeros días de la agresión israelí contra el Líbano, continúa sus reuniones de coordinación y la actualización de los procedimientos y datos requeridos.

Este martes, los aviones y la artillería israelí ocasionaron víctimas civiles al apuntar a las localidades de Jibchit, Beit Leif, Kfar Rumman, Khiam, Houla y Kafr Kila, en el sur libanés.

Por su parte, la Resistencia de Líbano (Hizbulah) activó sus unidades aéreas y golpeó con cohetes Katyusha, drones y artillería el cuartel general del batallón Al-Sahl en la base de Beit Hillel, el sitio Jal Al-Alam y una posición recién establecida de soldados en el asentamiento Kfar Yoval, en respuesta a los crímenes israelíes contra civiles y en respaldo a Gaza.

En este escenario, el jefe del Departamento de Operaciones de Paz, Jean-Pierre Lacroix, llegó al Líbano para su segunda visita a Medio Oriente este año.

De acuerdo con la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas (Unifil), el representante del organismo multilateral dialogará con altos dirigentes libaneses, las Fuerzas Armadas y el contingente de cascos azules, con el propósito de insistir en la renovación del compromiso con la Resolución 1701.

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