«Los pasajeros que, por casualidad, permanezcan en la zona de tránsito internacional del aeropuerto de Guarulhos, en Sao Paulo, o en otros aeropuertos con conexiones internacionales, si no poseen visa de entrada en territorio brasileño, serán rechazados», indica un comunicado de la cartera.

Tal código prevé la no exigencia del visado para casos de conexión o escala siempre que el viajero permanezca en la zona de tránsito internacional.

«El objetivo de la legislación brasileña fue facilitar el procedimiento de escalas o conexiones en los aeropuertos, reduciendo trámites burocráticos y operando de forma más rápida el proceso de transferencia y/o parada de pasajeros entre tramos internacionales», refiere el comunicado.

Aclara que los pasajeros no admitidos no serán deportados, pues Brasil es un país intermedio y no el destino final.

«En este contexto, como el pasajero señala, desde el acto de adquisición del billete aéreo, la intención solo de tránsito por territorio brasileño no se aplica medida de deportación, sino, sí, de efectividad del tránsito hasta el país de destino final del pasajero», agrega la nota oficial.

La medida no será válida para pasajeros que vengan de países exentos de presentación de visa para entrar en el gigante sudamericano.

Será lícita solamente para aquellos que lleguen a suelo brasileño desde naciones, en las cuales se requiere la presentación del documento y no tiene Brasil como destino final.

La medida fue adoptada después que la Policía Federal identificò que migrantes indocumentados están siendo utilizados por organizaciones criminales de tráfico de personas.

Investigaciones demuestran que los viajeros compran billetes con destino a países de América del Sur. Cuando llegan a Brasil para una escala, solicitan refugio, renuncian a seguir hacia el destino final o regresar a los países de origen y permanecen de forma irregular en las áreas restringidas de los aeropuertos.

En su totalidad vienen de países asiáticos y quieren llegar a Estados Unidos y Canadá.

«La Policía Federal identificó que los viajeros en esta situación son orientados por las organizaciones criminales a recurrir a la solicitud de refugio para entrar en territorio brasileño, en sustitución injustificada de la necesidad de visado de entrada en Brasil», recalca el Ministerio de Justicia.

En una década, de 2013 a 2023, el número de solicitudes de refugio en la terminal aérea de Guarulhos aumentó 61 veces, pasando de 69 a cuatro mil 239.

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