Tal contrato busca modernizar la flota ferroviaria del país balcánico. En un comunicado publicado en su web, Skoda precisa que ganó un contrato para fabricar y suministrar hasta 25 unidades eléctricas sin barreras, que reemplazarán a los trenes antiguos y ofrecerán más de 300 asientos en vagones con aire acondicionado.
El contrato básico, por un valor de más de 500 millones de euros, cubre el suministro de 20 unidades eléctricas de cuatro coches basadas en el conocido tipo RegioPanter, e incluye la prestación de un servicio completo durante 15 años, así como una opción para otros cinco vehículos, añade la nota.
La ministra de Transportes y Comunicaciones de Bulgaria, Krasimira Stoyanova, calificó el acuerdo como un gran paso hacia la renovación de la red de trenes de su país.
Después de más de 165 años de existencia, Škoda es hoy un fabricante de soluciones complejas de transporte, con una amplia gama de vehículos y componentes, incluidos tranvías, unidades de trenes suburbanos, trenes de metro, autobuses eléctricos y trolebuses, así como sistemas de control y accionamiento.
La empresa, que forma parte del consorcio financiero internacional PPF Group, tiene sede central en estos momentos en Ámsterdam (Países Bajos). El Grupo Skoda emplea a 10 mil personas, y sus centros de producción están en la República Checa, Finlandia y Turquía.
Cuenta además con unidades de negocio en Alemania, Italia, Austria, Bélgica, Polonia, Hungría y Ucrania.
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