Al intervenir en el Encuentro de Líderes del Sector Agropecuario, Jiménez puntualizó la importancia de implementar políticas públicas duraderas para alcanzar este propósito, y, al mismo tiempo, aprovechar la existencia de áreas aptas para el cultivo.
Consideró que una política agropecuaria bien estructurada podría transformar a República Dominicana en un centro de producción de alimentos para el Caribe, Estados Unidos y Europa.
Se refirió, en particular, a la necesidad de proteger más los terrenos agrícolas y lamentó que grandes extensiones de suelo fértil con potencial agropecuario se destinen hoy para la construcción principalmente de viviendas.
De acuerdo con el extitular, mejorar los caminos rurales, garantizar un acceso adecuado al agua, especialmente en zonas áridas, y la inversión en tecnología, podría aumentar la capacidad productiva de muchos terrenos.
En esa misma línea, reiteró la importancia de facilitar también el acceso a financiamiento para que los productores puedan adquirir equipos modernos y construir infraestructura agrícola, como plantas de almacenamiento.
Comentó que este compromiso debe involucrar tanto al gobierno como a los sectores productivos e insistió en que la clave del éxito está «en la continuidad de estas políticas para asegurar el futuro del sector”.
La semana pasada líderes agropecuarios presentaron un grupo de ideas destinadas a enfrentar los desafíos alimentarios y mejorar la sostenibilidad como es la creación de un fondo de inversión para la seguridad alimentaria, manejado por el Banco Agrícola, y el fortalecimiento del seguro agropecuario que incluya a medianos y pequeños productores.
Asimismo, propusieron la constitución de grupos de trabajo público-privados que se encargarían de elaborar un plan para atender los impactos del cambio climático en la agricultura y la ganadería, así como la elaboración de un plan nacional de formación de las nuevas generaciones.
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