El Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) anunció durante una sesión ordinaria la ampliación del período de pesquisas a la entidad hasta el 13 de octubre, para obtener más información precisa sobre operaciones dudosas, algunas aún por procesar, añadió el periódico Delfino.cr.
La intervención emprendida sobre supuestas acciones fraudulentas detectadas desde mayo requiere tiempo adicional para evaluar de manera exhaustiva un plan de regularización propuesto por los accionistas, explicó la entidad estatal reguladora, citada por el diario.
El programa extendido ahora hasta octubre –argumentó- deberá garantizar la corrección de las deficiencias identificadas en Desyfin S.A. y buscar garantías de su viabilidad financiera.
La publicación recordó que la Ley 9816 otorga a Conassif la facultad de extender este tipo de pesquisas hasta por 30 días naturales, en caso de que la situación lo ameritara debido a su complejidad.
El proceso concluirá con un informe al Conassif de la interventora titular, Marianne Kött, con recomendaciones sobre la presunta fiabilidad de la financiera, y, de comprobarse lo contrario, la institución determinará el mecanismo adecuado para solucionar el problema o liquidar la empresa.
La Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) acusó a mediados de agosto al exgerente general de Desyfin S.A, Silvio Lacayo, de prohibir la entrega de información requerida para su fiscalización, según el periódico El Observador.
La negativa del directivo de limitar datos imprescindibles ante los reguladores comenzó desde el 14 de mayo durante una visita a la empresa por los funcionarios, en medio del proceso de intervención que se le practicaba ya desde aquel momento, añadió el diario.
El proceso de intervención, iniciado por personal del Conassif el 13 de agosto contra esa entidad (también arrendadora y corredora de Seguros), detectó entre las consecuencias de sus operaciones fallidas que unos mil ahorrantes podrían percibir pérdidas.
Los expertos detectaron en el ente monetario una pérdida patrimonial del 88,55 por ciento durante los últimos siete meses, lo cual redujo de forma considerable sus caudales netos.
El papel rector del Conassif fue recomendado, a su vez, por la Sugef, al calificar a Desyfin con una irregularidad financiera «de grado tres», conforme con lo establecido por la Ley Orgánica del Banco Central de Costa Rica.
“Este nivel de irregularidad –aclaró la superintendencia- es aplicable cuando una entidad sufre pérdidas que reducen su patrimonio en más de la mitad”.
mem/apb