Los 115 bienes culturales fueron trasladados en el avión presidencial junto con el regreso de la delegación que asistió a la Asamblea General de Naciones Unidas efectuada en el trascurso de esa semana.
Parte de los artículos, dentro de los se hallan vasijas y otros implementos de cerámica, pertenecían a la colección James Lawrence, quien sirvió en el Cuerpo de Paz en Putumayo, en el sur de la nación sudamericana, entre 1970 y 1972.
El estadounidense adquirió ajuares funerarios en mercados locales, conocidos como “huacas” y 1972 llevó a Nueva York varias docenas de piezas, incluyendo máscaras, figuritas de arcilla y otros objetos significativos.
Tras su fallecimiento, su hijastra, Jessica Lawrence, identificó los elementos y se puso en contacto con la Embajada de Colombia en Washington para entregarlos.
El resto procede de una colección anónima dada a la legación diplomática en marzo pasado.
“La repatriación de estos 115 bienes culturales marca un avance en la protección del patrimonio colombiano y un claro ejemplo de cooperación internacional», expresó el Embajador de Colombia en Estados Unidos, Daniel García-Peña.
«Invitamos a quienes aún custodian piezas de origen colombiano a facilitar su retorno y con ello a preservar nuestra herencia cultural”, añadió.
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