Pistorius sería propuesto en lugar del actual canciller federal Olaf Scholz, quien aceptó llevar un voto de confianza al Bundestag (Parlamento), antes de la próxima Navidad, destacó el diario Bild.
Dentro de las filas del SPD existe inconformidad con la labor desarrollada por Scholz y temen que su figura provoque una derrota total en los comicios generales anticipados, tras fracturarse la coalición de gobierno con nacional-liberales y ecologistas.
Con el político más popular en Alemania, (en alusión a Pistorius) tenemos la oportunidad de convertirnos en el partido más fuerte o al menos lograr mejores resultados, señalaron en su cuenta de Instagram los políticos Marcus Schreiber y Tim Shtoberock.
Ambos políticos socialdemócratas reconocieron que Scholz realizó una buena labor en su puesto de canciller federal, pero ello fue insuficiente para recibir el respaldo de la mayoría de los ciudadanos, lo cual puede ser un lastre en las urnas, destaca Bild.
Scholz, hasta el momento mantiene su intención de presentarse en las nuevas elecciones como candidato socialdemócrata.
La crisis política interna se agudizó en Alemania, después de las diferencias surgidas en la alianza en el poder en torno a temas como el presupuesto, las finanzas y la ayuda militar y económica a Ucrania.
Además, la llamada coalición semáforo (por el color de los símbolos de los tres partidos) tampoco encontró un lenguaje común sobre la flexibilización del llamado freno de la deuda, que prohíbe al país gastar más de lo que ingresa.
El efecto bumerán de las sanciones aplicadas a Rusia, sobre todo, en la esfera energética, la aplicación prematura de medidas de descarbonización y otras de corte ecológico provocaron un alza de los energéticos y una inflación histórica con consecuencias económicas.
La víspera, la dirección del consorcio automotriz Volkswagen anunció el cierre de tres grandes fábricas y el despido de miles de obreros, en busca de reducir los elevados gastos de producción, en medio de paros organizados por los empleados de ese sector.
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