Denise Charles, especialista principal del Ministerio de Educación, anunció un programa cuyo objetivo es inculcar en los estudiantes el valor de la herencia e historia local y prepararlos para exponer al mundo la cultura nacional.
Charles se refirió al programa como una profunda reforma educativa, y apuntó que el país debe avanzar «hacia la transformación de la educación basada en el amor por nuestra nación, y la necesidad de ser más reconocidos a nivel mundial», acotó.
Recalcó la importancia de educar a los jóvenes en la adopción de valores que identifiquen al país antes de subir al escenario internacional, y lo definió como el deber supremo de todos.
La educación en Barbados es gratuita y obligatoria desde los cinco hasta los 15 años, pero según datos de diversas fuentes la incidencia de factores como altos niveles de pobreza impiden el acceso a un alto número de niños y jóvenes.
Desde el inicio de su mandato, la primera ministra Mia Mottley anunció que fortalecería la atención educativa, en especial la pública de la cual siempre ha sido defensora.
Durante su Gobierno, el proceso de transformación del sector incluyó la asignación de significativos recursos a la incorporación de maestros y la implantación de programas que otorguen y faciliten el acceso a las clases menos favorecidas.
“Lo importante es que entendamos que esta nación no puede seguir descartando a tantos de nuestros niños todos los años. Y si es lo último que hago, ya sea dentro o fuera de la vida pública, voy a continuar con esta lucha porque esto define al Barbados del presente y al Barbados del futuro», dijo al iniciar la conducción del país en 2018.
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