Si la documentación de extradición está en orden, el Departamento de Policía de Nueva York transportaría a Mangione desde Pensilvania a su jurisdicción donde podría aparecer este mismo jueves en una corte de Manhattan.
Varias personas se reunieron afuera del juzgado del condado de Blair antes de la comparecencia de Mangione, y entre los asistentes había alguien que sostenía un cartel con la inscripción «Negar, defender, deponer», haciéndose eco de las palabras escritas en casquillos de bala encontrados en la escena del crimen, reseñó ABC News.
También se podía leer una pancarta que decía «Liberen a Luigi», en una muestra de lo que este triste acontecimiento ha sacado a flote: el problema de los seguros de salud que afecta a la mayoría de los ciudadanos de Estados Unidos.
Mangione enfrenta una acusación formal de 11 cargos por parte de la Fiscalía del Distrito de Manhattan y también se espera que enfrente cargos federales del Distrito Sur de Nueva York.
De acuerdo con los informes, los cargos federales podrían hacer que Mangione sea elegible para la pena de muerte y se enfrenta a una sentencia máxima de cadena perpetua sin libertad condicional si es declarado culpable de las imputaciones estatales.
La abogada de Mangione en Nueva York, Karen Friedman Agnifilo, expresó en una declaración que «el caso de asesinato en primer grado y terrorismo de Estado con cargos excesivos es sumamente inusual y plantea serias preocupaciones constitucionales y estatutarias de doble enjuiciamiento».
«Estamos listos para luchar contra estos cargos en cualquier tribunal en el que se presenten», añadió.
Por su parte, Danielle Filson, portavoz del fiscal de distrito de Manhattan Alvin Bragg, subrayó que «el caso estatal procederá en paralelo con cualquier caso federal».
Mangione, de 26 años, fue arrestado el 9 de diciembre en un establecimiento de comida rápida en Pensilvania tras casi una semana prófugo de la persecución policial.
El joven está acusado de matar a tiros a Thompson en las afueras de un hotel Hilton el 4 de diciembre, cuando el ejecutivo se dirigía a una conferencia de inversores.
Un gran jurado de Manhattan elevó los cargos contra él para incluir asesinato en primer grado en apoyo del terrorismo, anunciaron los fiscales el martes.
El asesinato en el corazón de Midtown Manhattan tenía la «intención de evocar el terror», afirmó Bragg.
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