miércoles 12 de febrero de 2025

Prevén 230 mil visitantes por fiesta del Cristo Negro en Guatemala

Ciudad de Guatemala, 12 ene (Prensa Latina) Autoridades de Guatemala estimaron hoy la llegada de 230 mil visitantes por los festejos del Cristo Negro del municipio Esquípulas, departamento de Chiquimula, cuya romería declararon Patrimonio Cultural de la Nación en 2015.

Celebrada los 15 de enero de cada año, esta vez vendrán a venerar la imagen más de 20 mil 900 locales y extranjeros, en comparación con la cifra anterior registrada, del 10 y al 19 de igual periodo, detalló una fuente oficial.

El Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat) precisó además que espera igualmente una derrama económica mayor, calculada en 16,7 millones de quetzales (unos dos millones de dólares) de quienes se presenten en la Basílica de esa demarcación.

La entidad implementa un plan preventivo que incluye el acompañamiento de los grupos de peregrinación, monitoreo y asistencia en fronteras, reforzamiento de la presencia institucional en el municipio, entre otras medidas.

Las celebraciones de los fieles católicos por el Cristo Negro comenzaron el pasado 6 en esta capital con la novena al Milagroso Señor de Esquipulas, como se le llama oficialmente.

Desde enero del 2024 Guatemala forma parte de la Red Mundial de Destinos de Turismo Religioso, que busca reunir y promover este sector de la población.

Una de las rutas concebidas aquí es la Santa del Peregrino, con recorridos al Cristo de Esquipulas e iglesias en varios departamentos como El Progreso, Zacapa y Chiquimula.

Datos del Inguat divulgados refirieron que anualmente llegan hasta ese lugar alrededor de cuatro millones de personas, y de ellos en el entorno de 1,5 especialmente durante enero.

Por la “Capital Centroamericana de la Fe” caminan las personas con sombreros típicos, candelas, y veladoras encendidas para una petición especial o bendecirlas como un recuerdo y protección.

Historiadores ubican el nacimiento de la solemne festividad alrededor de 1595, cuando el escultor de origen portugués Quirio Cataño llevó a la entonces villa la imagen tallada por sus manos.

Posteriormente, fue trasladada a la iglesia en enero de 1759 y con el transcurso de los siglos, ese madero del Cristo crucificado se convirtió en el ícono de la fe católica en esta nación centroamericana.

De la talla, sobresale el trabajo del rostro y su color negro, que encierra un sinfín de mitos y leyendas.

En medios de prensa trascendió que el domingo próximo se efectuará por primer vez una misa en honor al Cristo de Esquipulas, en la Basílica de San Pedro, en Roma, Italia.

oda/znc

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