Un reporte del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), destaca que con una magnitud de 2,0 o mayor se reportaron dos mil 82 sismos, de ellos 248 entre 3,0 y 3,9, mientras 26 alcanzaron de 4,0 a 4,9 y solo uno llegó a 5,0, ocurrido el 1 de agosto del pasado año cerca de Pietrapaola, localidad de la sureña región de Calabria.
Se registraron numerosas secuencias sísmicas principalmente en el centro de Italia, así como en la meridional zona calabresa jónica, en la provincia de Parma, en el sur del mar Tirreno y en la localidad de los Campos Flegreos, en la región de Campania, aunque todas fueron de baja magnitud y corta duración.
La región que registró el mayor número de terremotos de magnitud mayor o igual a 2,0 en 2024 fue Emilia Romaña, con 434, seguida de Calabria y Sicilia, pero si se consideran también los terremotos de magnitud inferior a 2,0, ocuparían los primeros puestos las regiones de Las Marcas y Umbría, con más de tres mil eventos cada una.
Esas cifras están en línea con los datos de los últimos años, pues desde 2019, el número total de terremotos localizados en Italia se mantiene estable entre 16 mil y 17 mil terremotos anuales, señala el documento.
Lucía Margheriti, directora del Observatorio Nacional de Terremotos del INGV, destacó el trabajo realizado por el servicio de vigilancia sísmica de ese instituto durante el pasado año, que garantizó la comunicación oportuna a las autoridades de Protección Civil y a la ciudadanía, sobre los parámetros de los eventos ocurridos.
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