Con la entrada en funciones de la nueva administración estadounidense nos corresponde consolidar una UE unida, fuerte y soberana, ligada a los vínculos transatlánticos, que sepa afirmar sus propios intereses y defenderlos con sus valores e instrumentos, subrayó en el Palacio del Elíseo.
En declaraciones a la prensa acompañado por Scholz, Macron consideró que la prioridad del bloque de 27 países debe enfocarse en la competitividad, la prosperidad y la seguridad, en aras de preservar su democracia y sus valores económicos y sociales.
El regreso de Trump a la Casa Blanca, consumado el 20 de enero, implica un desafío para Europa en temas comerciales y de defensa, a partir del proteccionismo que sostiene el presidente republicano.
La víspera, el magnate inmobiliario manifestó que “la UE es muy mala con nosotros (…), no toma nuestros automóviles ni nuestros productos agrícolas, de hecho, no toma gran cosa”.
A juicio de Trump, imponer aranceles es la única manera de lograr que “nos traten correctamente”.
De acuerdo con Macron, en sus conversaciones con el canciller alemán abordará la necesidad de que el viejo continente impulse sectores clave como el automotor, la industria química, la inteligencia artificial, la biotecnología, el espacio y la defensa, reduciendo la dependencia foránea.
Asimismo, manifestó que en un escenario cada vez más brutal, urge proteger a las empresas y los agricultores frente a la competencia desleal.
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