Esta postura difundida hoy en la prensa siria, fue expresada por el jefe de la diplomacia en una sesión de diálogo con el ex primer ministro británico Tony Blair sobre Siria y su futuro económico, durante el Foro Económico de Davos en Suiza.

El mayor desafío que enfrentamos son las sanciones y su suspensión es la clave para la estabilidad en Siria, indicó el Canciller.

Añadió que si el mundo quiere que Siria salga de la tragedia, debe apoyar los sueños del pueblo sirio.

Los sirios enfrentan muchos desafíos, pero tenemos muchas oportunidades de inversión, y la economía siria estará abierta a las asociaciones e inversiones extranjeras, afirmó. Al-Shaibani habló sobre la visión política de la nueva administración siria, sus aspiraciones en la fase actual y la gestión del proceso de transición política que vive el país.

Consideró que la situación de seguridad actual en Siria es aceptable si se toman en cuenta los 14 años de guerra y destacó que el pueblo sirio no se dejó arrastrar a conflictos sectarios.

Los sirios ahora tienen muchas aspiraciones y ambiciones después de haber sido sometidos a una guerra existencial y la tragedia que habían vivido anteriormente nunca se repetiría, dijo el político.

Respecto al proceso político, Al-Shaibani explicó que Siria será gobernada por el estado de derecho y la constitución. Nuestra visión está comprometida con la participación de todos los sirios, sin excepción alguna, en la configuración del futuro del país, puntualizó.

Añadió que los sirios dentro del país y en el extranjero deben estar convencidos de que su nuevo gobierno busca lograr la paz, seguridad y estabilidad.

Aclaró que las mujeres sirias tendrán un papel fundamental en el futuro de Siria y serán partícipes en la vida política.

El Ministro hizo un llamamiento a los refugiados sirios a regresar a su país para aprovechar sus experiencias en el proceso de reconstrucción de una nueva Siria, subrayando.

El ministro de Asuntos Exteriores sirio envió numerosos mensajes políticos a la comunidad internacional, e indicó que Siria ha comenzado ahora una nueva página y va a ser un país de paz que no representa una amenaza para ninguna otra nación.

En el plano económico, reveló que Damasco trabaja para establecer asociaciones con los países del Golfo en los sectores de energía, electricidad, aeropuertos, carreteras, salud y educación.

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