De acuerdo con la Dirección de Orientación, el movimiento de las Fuerzas Armadas en el sector central del sur ocurrió en coordinación con el comité encargado de supervisar el acuerdo de alto al fuego, liderado por Estados Unidos.
El comunicado de la institución denunció el incendio por parte de Israel de varias viviendas en las localidades de Odaisseh, Rab al-Thalatheen, Aitaroun y Al-Wazzani.
También condenó los ataques israelíes contra vehículos mientras realizaban labores de recuperación de cuerpos de mártires en el centro de Taybeh, en el distrito de Marjayoun.
Ante las violaciones israelíes, el Comando del Ejército llamó a la ciudadanía a acatar las directrices emitidas en sus comunicados oficiales y las instrucciones de las unidades militares desplegadas.
El ente castrense pidió prestar atención a las autoridades locales con el fin de preservar su vida y seguridad.
A su vez, la Fuerza Armada reafirmó su acompañamiento a los residentes en los poblados fronterizos y el compromiso con la implementación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU.
Desde el 26 de enero cuando finalizó el plazo de 60 días para la retirada israelí del sur del país, el ejército de Tel Aviv aumentó sus agresiones en Líbano, atacó a civiles, bloqueó carreteras, bombardeó bosques e incendió casas.
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