martes 18 de febrero de 2025
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Una sola bandera una sola nación, reclaman en Panamá (+Foto)

Ciudad de Panamá, 3 feb (Prensa Latina) La soberanía de Panamá sigue hoy bajo la amenaza de Estados Unidos, señalan las organizaciones sociales que reiteran en las calles su lema de “una sola bandera, una sola nación”.

Las manifestaciones de protestas en la capital contra la presencia del secretario de Estado, Marco Rubio, se acrecentaron en la medida que conocieron más detalles de la reunión con el presidente anfitrión, José Raúl Mulino, en la que el primero sostuvo la exigencia del inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, de retomar el control del canal de Panamá, debido a la influencia de China.

El exministro de Trabajo y ex embajador de Panamá en Cuba, Reinaldo Rivera, fue de los participantes en las concentraciones en la Plaza 5 de mayo que enfrentó a las unidades antimotines y les exigió respeto a las luchas a los mártires que ofrendaron sus vidas por recuperar la vía interoceánica, nuevamente bajo el acoso de Washington.

Rivera repudió que desde el norteño país vino el exsenador de la Florida, conocido como un “halcón” en política exterior y representante de los sectores más ultraconservadores del Partido Republicano a dictar lo que había que hacer, lo cual es inadmisible.

También el secretario general del poderoso Sindicato Único Nacional de los Trabajadores de la Industria de la Construcción y Similares ( Suntracs) Saúl Méndez, rechazó las declaraciones de Mulino apenas concluyó su encuentro con Rubio en las que mintió al país sobre sus intenciones.

“Rubio lanzó un ultimátum y vino a declararle la guerra a Panamá”, sentenció el también vocero de la alianza Pueblo Unido por la Vida, por eso los verdaderos patriotas debemos estar más unidos que nunca, remarcó.

El jefe de la diplomacia estadounidense concluye este lunes su agenda con la supervisión de un vuelo chárter para deportar a migrantes colombianos, otro de sus puntos clave en el encuentro con Mulino.

La víspera, en su intercambio de unas dos horas en Palacio de las Garzas (sede del Ejecutivo), rodeado de expectativas, el jefe de la diplomacia estadounidense transmitió al presidente Mulino la preocupación de Trump respecto a la influencia y el control del Partido Comunista Chino “en el área” del Canal de Panamá, y señaló que esta situación representa una amenaza para la vía interoceánica y una violación al Tratado de Neutralidad.

En un comunicado distribuido por el Departamento de Estado de EU, se afirmó que “el secretario Rubio dejó en claro que este statu quo es inaceptable y que, de no haber cambios inmediatos, Estados Unidos tomará las medidas necesarias para proteger sus derechos”.

Mulino, en cambio, calificó el encuentro como “altamente respetuoso y cordial” y descartó cualquier “amenaza real” de una intervención militar estadounidense en el Canal.

“No cabe duda de que el Canal es operado por nuestro país y así seguirá siendo”, declaró, sin hacer referencia a los “cambios inmediatos” exigidos por el visitante.

Las alarmas son crecientes en el istmo, luego que el propio Trump insistiera en sus amenazas de “recuperar el Canal de Panamá” por motivos de seguridad nacional y reiteró que China estaría controlando la vía acuática.

En medio de un recorrido de Rubio por las esclusas de Miraflores y recibido por el administrador del Canal, Ricairte Vázquez, el magnate republicano lanzó la víspera otra de sus amenazas ante medios de prensa estadounidenses en Washington, cuando afirmó que Estados Unidos va a recuperar el canal o “algo muy poderoso va a suceder”.

A su turno, la Autoridad del Canal informó al secretario de Estado sobre su compromiso de trabajar en conjunto con la marina estadounidense para “optimizar la prioridad en el tránsito de sus buques” a través de la vía interoceánica.

Los colectivos critican que aunque la comparecencia de Mulino pretendía esclarecer al país sobre lo conversado con Rubio y las amenazas de Trump, dejó más preguntas que respuestas en torno al fondo y alcance de los consensos.

Sobre el Canal, el punto medular del encuentro tras las mentiras del inquilino de la Oficina Oval sobre un supuesto control chino de la vía interoceánica, Mulino indicó que “hizo las voces de descargo” sobre lo dicho por el republicano y que aclaró el asunto de la soberanía.

Sin embargo, a pesar de dicha “aclaración”, este explicó que acordaron abrir un nuevo espacio de reuniones de equipos técnicos entre la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y funcionarios designados por Estados Unidos para “conversar” y “aclarar todas las dudas que puedan seguir teniendo” sobre la soberanía del Canal.

Otra de las inquietudes que surgieron de las declaraciones de Mulino se relacionan con los puertos de Cristóbal y Balboa, gestionados desde 1997 por la empresa Panama Ports (PPC), filial de la empresa CK Hutchison Holdings, radicada en Hong Kong, en el Atlántico y el Pacifico, respectivamente

Según el mandatario, las quejas de la administración Trump “tiene que ver más con los puertos que con el Canal”, y anunció que deberían esperar los resultados de la primera auditoría de la Contraloría que se realiza a las concesiones para tomar otras acciones.

Otra manera de complacer a Washington, según los gremios, es que Mulino adelantó que no renovará el Memorándum de Entendimiento firmado en 2017, en torno al proyecto de “La Ruta de la Seda”, la principal apuesta de los chinos en materia de su proyección política y comercial fuera de sus fronteras, al tiempo que invitó a Rubio a que “incentive” a las empresas estadounidenses para que inviertan en Panamá.

También tema polémico fue el relacionado con la migración irregular y el trato a los indocumentados cuando Mulino aseveró que ofreció a Estados Unidos la pista de aterrizaje de Nicanor en la localidad de Metetí, en la selva de Darién, para que sea desde allí donde se surta el trámite de repatriación de personas

Mulino aclaró que esta “ampliación” no involucrará presencia militar de Estados Unidos en el Darién, lo que refutaron lideres sindicales como Méndez, que aseguran es un pretexto para que aeronaves de guerra norteamericanas lleguen al istmo para atacar a pueblos hermanos de la región.

La situación política en Venezuela también fue un asunto de la agenda no oficial de Rubio, pues antes de elogiar el liderazgo regional del presidente Mulino en apoyo de una Venezuela “democrática y libre”, la prensa conoció que se reunió con el opositor Edmundo González, durante su visita al hotel American Trade, de San Felipe, en el Casco Antiguo, y luego de asistir a una misa en la iglesia nuestra Señora de la Merced y previo a su reunión con Mulino.

Al mismo tiempo que tenía lugar todas estas conversaciones, organizaciones sindicales, de maestros y estudiantes se concentraron en la plaza 5 de Mayo, con banderas panameñas y consignas en rechazo de la visita de Rubio.

“Mulino que se ha acostumbrado a regañar al pueblo, ahora que se pare firme ante Trump y Rubio”, exigían , mientras quemaban banderas estadounidenses ante las unidades policiales, también otras manifestaciones se realizaron frente al edificio de la administración del Canal con la siembra simbólica de la insignia nacional.

mem/ga

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