Según las fuentes, esta visita constituye el primer paso público para reconocer y tratar con las nuevas autoridades sirias, con las que Argel se ha mostrado cautelosa en el último período.
Attaf tiene previsto reunirse con su homólogo sirio, Asaad Al-Shaibani, para discutir el reordenamiento de las relaciones entre los dos países tras los cambios en Siria.
Argelia, que actualmente ocupa un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, pretende desempeñar un papel en el Consejo a favor de Damasco, presentando iniciativas para levantar las sanciones impuestas a Siria y defender sus intereses frente a las agresiones israelíes.
Esta nación árabe-africana hará también gestiones para emitir una resolución internacional que obligue a Israel a retirarse de las zonas sirias que ocupó después de la caída del gobierno de Al-Assad.
A finales de diciembre pasado, el canciller argelino declaró que su país estaba siguiendo de cerca la situación en Siria y que Argel reconoce Estados y no gobiernos, sobre la base de un principio establecido por los fundadores de la política exterior argelina desde los primeros días de la independencia en 1962.
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