La Comisión de Producción, Economía y Presupuesto del legislativo al presentar el dictamen favorable de la normativa destacó las actualizaciones realizadas desde la Asamblea Nacional al marco regulatorio de las leyes vinculadas al sistema monetario y financiero.

En ese sentido, señaló que el crecimiento económico y el desarrollo de Nicaragua deben continuar con el apoyo de nuevas regulaciones al sistema financiero que generen mayor solvencia y competencia que fortalezcan la seguridad y aumente la confianza del público.

El presidente de la Comisión, Wálmaro Gutiérrez, al intervenir en el plenario explicó que esta reforma deja claro que, ante una situación donde un banco llegue a quebrar, el inversionista bancario no solamente va a responder con la inversión que tiene esa institución financiera, sino también con su patrimonio personal.

La normativa fortalece los requerimientos de capital inicial y adecuación de este en las instituciones bancarias, para ajustar el capital regulatorio de los bancos y, por ende, su capacidad de absorber pérdidas.

Asimismo, agrega tres nuevas reservas de capital, entre ellas la conservación de capital, reserva temporal de capital anticíclica y la de riesgo sistémico, para crear colchones financieros y proteger la solvencia bancaria.

También incorpora nuevas disposiciones como supervisión consolidada de grupos financieros, planes de recuperación y de resolución, así como supervisión basada en riesgos y pruebas de resistencia con base en los estándares internacionales.

Otros de los elementos de la ley es la incorporación a las cooperativas de ahorro y crédito y a los proveedores de servicios de tecnología financiera de intermediación y financiamiento bajo la regulación de supervisión de la superintendencia de bancos.

Además, fortalece la composición del gobierno corporativo de las entidades financieras mediante la integración de directores independientes, y amplía el monto protegido contra embargos de los depósitos de ahorro de personas naturales, entre otros elementos.

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