El juez Leonardo Méndez designó a un síndico para ocupar la dirección de la empresa, bajo acusaciones de estafa, que desplaza a su director, Pablo Carrasco.
Méndez dispuso un concurso de acreedores y el embargo también abarca a la esposa de Carrasco, Ana Teresa Iewdiukow y Daniela Cabral, viuda de Gustavo Basso, el socio de Carrasco que muriera meses atrás en un accidente de tránsito aún bajo investigación.
La empresa, con severos problemas de liquidez y un pasivo muy superior a sus activos, dejó de pagar a unos cuatro mil inversionistas tras la crisis que derivó de la caída de otras dos empresas similares, República Ganadera y Grupo Larrarte.
Los inversionistas denunciaron una estafa multimillonaria, lo que derivó en la intervención judicial de la empresa.
Este lunes la justicia confirmó el cierre de fronteras y la entrega de los documentos de identidad de Carrasco, su esposa y la viuda de Basso, quienes ahora son investigados por el fiscal de Lavado de Activos Enrique Rodríguez.
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