Fuentes locales y organizaciones no gubernamentales señalaron a Actualité.CD. que la mayor parte de los habitantes de esta localidad huyeron debido a la amenaza de los rebeldes, situados a unos 50 kilómetros de distancia, o por el temor ante el intercambio de fuego entre soldados congoleños y miembros de las milicias locales.

Los Wazalendo, como llaman a estos combatientes, y los miembros de las Fuerzas Armadas de la RDC, comenzaron sus enfrentamientos la víspera, pues los militares, quienes se retiraron a Uvira por el avance del M23, decidieron continuar retrocediendo hacia Kalemie, en Tanganyika, y llevarse el material de guerra.

Al menos 17 personas murieron en las últimas horas en esas confrontaciones, pues los Wazalendo quieren que los militares dejen armas y municiones antes de partir.

De acuerdo con declaraciones de la población a Actualité.CD., en su fuga los soldados confiscan teléfonos, dinero y otras pertenencias de la población, rompen las puertas de las casas y disparan contra cualquier civil que se resista.

En medio del desorden, más de 500 personas recluidas en la prisión de Mulunge se fugaron en la mañana de este miércoles. Entre los evadidos hay civiles y militares, quienes aprovecharon el derribo de las puertas de la prisión, una acción cometida por los soldados congoleños que se retiraban de la ciudad.

Las salidas masivas de la prisión se observaron igualmente en Goma, el día antes de que el M23 entrara en la ciudad, y del mismo modo ocurrió antes de la ocupación de Bukavu.

Este martes los rebeldes conquistaron la ciudad de Kamanyola y avanzan, según varias fuentes locales, en la llanura de Ruzizi hacia Uvira, ciudad situada en la costa del lago Tanganyika, frente a Bujumbura, la capital de Burundi.

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