Segundos en el Grupo G, para lo cual debieron trabajar duro, los actuales monarcas de esta nación indochina debieron enfrentar en octavos de final al fortísimo Sanfrecce Hiroshima, de Japón, que lideró la llave E con cuatro puntos de ventaja sobre el ocupante de la segunda plaza, el Sydney FC.

En el choque de ida, disputado el 12 de febrero último, los nipones, recién coronados campeones de la Supercopa de su país, se impusieron sin contratiempos por 3-0, aun cuando el desafío se disputó en los predios del Nham Din.

Mientras, en el partido de vuelta los discípulos del director técnico Vu Hong Viet volvieron a caer, esta vez como visitantes y por goleada de 4-0, ante el embate del Sanfrecce Hiroshima, para cerrar la serie de octavos con marcador global de 7-0.

El Sanfrecce Hiroshima fue demasiado fuerte. Hicimos todo lo posible, pero no pudimos hacer nada contra ellos, admitió el entrenador vietnamita, quien señaló además que el clima en la ciudad japonesa era gélido, lo cual también afectó en parte el rendimiento del Nam Dinh.

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