Durante su discurso en la sesión legislativa convocada por el presidente del Parlamento, Nabih Berri, el jefe del Ejecutivo enfatizó que el gabinete buscará ser digno de su nombre como el gobierno de la salvación y la reforma.

En palabras de Salam, el primer objetivo del gobierno es trabajar para establecer el estado de derecho con todos sus elementos, reformar sus instituciones y fortalecer su soberanía.

Consciente de la destrucción causada por la reciente agresión israelí, el titular del Consejo de Ministro expresó ante la unicameral legislatura el compromiso con la reconstrucción y financiación a través de un fondo específico.

Para la autoridad, el gobierno expresa su voluntad de adoptar las medidas necesarias para liberar todos los territorios libaneses de la ocupación israelí.

El dirigente libanés insistió en la disposición de extender la soberanía del Estado con sus fuerzas y cumplir con sus obligaciones, especialmente con respecto a la implementación de la Resolución 1701.

“Queremos un Estado que tenga el poder de decidir la guerra y la paz, y leal a la Constitución y al acuerdo nacional”, subrayó.

A su vez, puntualizó en la importancia de garantizar la justicia para todos a través de la independencia del poder judicial, administrativo y financiero y su reforma de acuerdo con los más altos estándares internacionales.

En este punto, insistió en la urgencia de acelerar las formaciones judiciales para investigar el caso de la explosión del puerto de Beirut, así como aplicar la ley sobre las personas desaparecidas por la fuerza y continuar la investigación del caso del desaparecido imán Musa al-Sadr.

Además, el gabinete trabajará para completar las investigaciones sobre los asesinatos políticos y los presos libaneses en las cárceles israelíes.

En su intervención, apuntó que el gobierno dará prioridad a los depositantes para preservar sus derechos, establecer un sistema de protección social y el retorno de los desplazados.

Según Salam, la declaración ministerial incluye el desarrollo de la infraestructura del sector del transporte, el Aeropuerto Rafic Hariri y el Puerto de Beirut, y además de los trabajos para comenzar a operar el Aeropuerto René Moawad en Qlayaat.

También, el gobierno está dispuesto a implementar leyes estrictas con respecto a las propiedades marinas y fluviales y buscará completar el trabajo para reanudar la exploración de petróleo y gas.

El primer ministro destacó que el gobierno ratifica su rechazo a los asentamientos de los palestinos y se adhiere a su derecho a regresar a su patria.

Hasta mañana, el Parlamento de Líbano debatirá en sesión sobre la confianza en el nuevo gabinete, requisito indispensable para que este pueda comenzar a ejercer sus funciones.

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