El estudio, que analizó los distintos tipos de agresiones ocurridas entre el 1 de enero de 2024 y el 8 de febrero de 2025, identificó 56 casos de agresiones contra la integridad física y la vida durante el proceso electoral en curso.

Es decir, los sufragios actuales han sido más violentos que en 2023, cuando se produjo el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio.

Los hechos de este año incluyen 25 asesinatos, 19 amenazas, ocho atentados, tres secuestros y una agresión física.

Del total de víctimas, el 67 por ciento fueron hombres y 33 por ciento mujeres y en cuanto a las organizaciones políticas más afectadas en primer lugar está la Revolución Ciudadana, seguida por los movimientos Avanza, Creando Oportunidades y el Partido Sociedad Patriótica (11 %).

Las provincias con más atentados contra la integridad física y la vida fueron Guayas, Manabí, Pichincha, El Oro y Santa Elena.

La investigación del OCVP, realizada también por la Fundación Friedrich Ebert y el colectivo Mega Mujeres, reveló que los líderes políticos fueron los más afectados por la violencia, así como los funcionarios públicos y líderes de opinión.

Los tres tipos principales de violencia política en Ecuador, de acuerdo con el OCVP, son los ataques contra la integridad física y la vida, violencia política por motivos de género y actos que vulneran los principios de igualdad y no discriminación establecidos en la Constitución.

De acuerdo con los observadores, a pesar que el Ejecutivo implementa medidas de seguridad, como estados de excepción y una declaratoria de conflicto armado interno vigente hace más de un año, la violencia persiste en el país e incide en la política.ç

El informe, presentado en una rueda de prensa, muestra datos parciales, pues el proceso electoral continuará hasta el 13 de abril, cuando el actual presidente y aspirante a la reelección, Daniel Noboa, y Luisa González, de la Revolución Ciudadana, se enfrenten en un balotaje.

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