Cerca de uno de los sitios ocupados por Israel dentro del territorio nacional, el primer ministro subrayó que cualquier retraso en esto constituye una violación de la soberanía libanesa, de la Resolución 1701 y de los acuerdos para el cese de hostilidades acordados por el gabinete anterior.

En su gira por las localidades de Khiam y Nabatieh, el líder del Ejecutivo renovó la decisión del gobierno de acelerar los trabajos de reconstrucción y el regreso digno del residentes a sus hogares.

Salam constató en su recorrido por la región sur las pérdidas y daños causados por la agresión israelí, las aldeas destruidas, las carreteras, las casas, las tierras agrícolas y los árboles quemados.

El titular del Consejo de Ministros escuchó el sentir de los sureños quienes denunciaron el sufrimiento tras el alto el fuego, las violaciones israelíes y resaltaron la firmeza y los sacrificios de los combatientes de la Resistencia.

Durante un contacto con pobladores reunidos frente al cuartel Benoît Barakat en Tiro, la autoridad subrayó que la principal prioridad del gobierno es reconstruir sus hogares y aldeas y garantizar su regreso digno.

En su intercambio con las Fuerzas Armadas, ratificó el compromiso del gobierno de fortalecer al ejército, aumentar su personal, mejorar su equipamiento, entrenamiento y condiciones, así como incrementar la capacidad para defender a Líbano.

Al visitar los cuarteles en Tiro y Marjaayoun, el jefe de gobierno destacó que el ejército libanés cumple con sus funciones con eficacia, refuerza su presencia con determinación y resolución para mantener la estabilidad en el sur y garantizar el retorno de los ciudadanos a sus pueblos.

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